Andres y Elias son dos amigos a los que les gusta bastante fumar porros por lo que para despedir el verano se juntan en un punto y fuman el ultimo porro de la temporada antes de que llegue el frio. Cuando se van Elias se encuentra con algo que no se esperaba. Se trata de un estuche que contiene cinco drogas distintas por lo que alucina y no tarda en llamar a Andres para relatarle lo que ha encontrado. Como buenos drogadictos que son no iban a dejar pasar la oportunidad de probarlas todas y deciden hacer un experimento dando cada droga a una persona distinta y viendo que es lo que pasa cuando se las toman. La historia da un giro cuando la novia de Andres lo llama para decirle que su abuela se ha muerto y le pide que vaya al entierro algo que no entraña dificultad alguna pero que no es facil cuando estas drogado.